Ozwell E. Spencer

1*Ozwell E. Spencer: Lord Ozwell E. Spencer es un personaje ficticio de la serie de videojuegos Resident Evil. Es el propietario y cofundador de la Corporación Umbrella, mencionado en varios documentos de los numerosos juegos de Resident Evil, aunque sólo hace aparición física en Resident Evil 5 y Resident Evil: The Umbrella Chronicles al final del capítulo «Puerta de la muerte», aunque no se ve su rostro. Es el cerebro detrás de muchos de los sucesos trágicos que ocurrieron en la saga.

2*Historia:Es uno de los personajes más importantes y misteriosos de Resident Evil. En los juegos, él es el dueño y cofundador de la Corporación Umbrella, una compañía farmacéutica que producía secretamente armas biológicas. Sus colegas Edward Ashford y James Marcus se unieron a su compañía, pero mostraron más interés en estudiar el recién descubierto Virus Progenitor. Marcus ayudó a crear el T-Virus (Tyrant Virus) combinando el Virus Progenitor con el ADN de una sanguijuela. Aunque Marcus y Spencer trabajaban en instalaciones separadas, los dos tenían una rivalidad mutua y ambos se consideraban una amenaza. Finalmente Ashford muere y Spencer se apodera de la compañía al mandar a sus subordinados, Albert Wesker y William Birkin, a asesinar a Marcus. Spencer lleva a cabo varios de los experimentos de su compañía en su laboratorio de las montañas Arklay. Contrata a un famoso arquitecto llamado George Trevor proveniente de Nueva York para que construya una mansión, pero pronto se da cuenta que Trevor sabe demasiado acerca de los secretos de la mansión. Spencer mata a Trevor y secuestra a su esposa e hija, Jessica y Lisa. Pero en vez de matarlas, Spencer las usa como especímenes para experimentación en los laboratorios de Umbrella, todo esto detallado mejor en los reportes de Wesker y en la versión nueva de Resident Evil. Los planes de Spencer iban de maravilla hasta que Marcus revivió y comenzó a buscar venganza. Marcus atacó el Eclíptic Express de Umbrella y provocó una infección total en la mansión de las montañas Arklay. Para evitar problemas, Spencer mandó a Sergei Vladimir a recuperar el prototipo de T-A.L.O.S. antes de que fuera demasiado tarde. La infección se propagó rápidamente por la región, dando lugar a los hechos de Resident Evil 0 y Resident Evil. El virus luego se propaga a Raccoon City durante los sucesos de Resident Evil 2 y Resident Evil 3: Nemesis, provocando que el Gobierno de Estados Unidos destruyera la ciudad para así poder contener la infección. Después de la destrucción de la ciudad, Spencer trató de hacer parecer el desastre como una conspiración del Gobierno contratando abogados y falsos testigos. Esto ayudó a Umbrella a seguir operando durante cinco años más. Después de ese tiempo, Wesker traicionó a Spencer entregando documentos secretos al Gobierno de Estados Unidos. Luego selló el fin de Spencer testificando en su contra. Después, el Gobierno cerró Umbrella y la desmanteló por completo. Desde el fin de Umbrella, no se ha vuelto a saber de Spencer. Es perseguido mundialmente. En los años posteriores, Spencer permaneció en la clandestinidad asegurándose de no tener contacto con el mundo exterior; sin embargo, los años lo fueron debilitando y el Spencer recio y arrogante que una vez fue se desvaneció paulatinamente, reduciéndolo a un anciano postrado para siempre en una silla de ruedas y conectado de modo permanente a un electrocardiógrafo. Sin embargo, sus días de fuga tuvieron un violento final cuando a Wesker, quien había ido personalmente a visitarlo, le reveló que su plan consistía en crear una nueva raza de humanos superiores utilizando el virus Progenitor, quedando él como un dios entre los hombres; también revela que de los numerosos niños Wesker, con potenciales ilimitados mediante el uso del virus Progenitor, fue el único que sobrevivió; sin embargo, toda la investigación se perdió con Raccoon City. Luego de esta oscura revelación, Wesker asesina a Spencer atravesándole el cuerpo con su mano.Cuando Chris y Jill llegaron al escondite de Spencer para arrestarlo, éste yacía muerto junto a Wesker.

La muerte de Spencer